El primero del 2010

Viene la tremenda responsabilidad
que atrapo y vulgarmente mato
la de iniciar las letras de este año
cubierto enero de fríos y locuras

me he visto en la necesidad de escribir
pues a lo largo de los sazones y desazones
de corazones y miles de razones
venideras en estos meses, en esas voces

inicia la temporada de caza
inicia la temporada de pezca
de mis ideas, que incesantemente
se esparcen en mis huesos.

ventisca de humo y locion etílica
me diluyen y obligan, retuercen,
caminan y me enfilan
no hay más que seguir la vida
que iniciar el año

y para todos y cada uno de nosotros
para mis ideas fallidas y nunca vendidas
para mis lienzos sin teñir
para mi sangre de árbol y hombre
aquí empieza la aplicación del caos


P.D. TARDE, PERO NUNCA ES PEOR