Desesperante animadversión circulante
dirijida hacia mi "otro yo"
al que piensa, al que extraña
al que sueña e incendia sus ideas.

intocable fervor, destino torcido
escrito con tinta y sangre
en el infinito de mis venas vacías
en lienzos invisibles de terror.

Las horas en reversa escasean
los aguijones del tic tac
horadando mi cerebro
entumeciendo mi mente

y te pienso, tan abstracta
tan lúcida y descompensada
tan trémula y vacía
sin más frases por decir

Escapan de mi mente
pensamientos bañados en licor
alcohol en combustión
incinerando mi interior.

Las volutas de humo escapan
de mi boca al derrocado infinito
sienten, me conectan a él.
Avecina una tormenta

Trópico incierto, arrasa mi huracán
y del otro lado del yo
del individuo que soy, no siendo
del que no sueña, no siente

El "otro yo", quizás el verdadero
el que hizo de su ambiente una coraza
el que invirtió el tiempo en espacio
y rompió el azar, forjando su destino

ese "yo", el que al parecer no piensa
pero estratega de miles de artificios
presa del arte llamado manipulación
el que niego ser mientras más lo soy

ese mismo, el que me atrae ser
me intriga y me inflige dolor
me entraña y me hace recordar
mi otro yo no es más que yo mismo
mi propio y auténtico único enemigo

Siempre hay un tonto en toda historia
el tonto que cree y se aferra vehemente
el que yace débil e indefenso
ante estímulos vagos.

Siempre hay un tonto que cae
en la penumbra y la sombra
aferrado a la luz tenue
del candil de la ignorancia

Siempre hay un tonto en toda historia
que nace al principio del final
sin entender los hechos y las causas
enfrentando consecuencias

siempre hay un tonto en toda historia
que al verse entre el filo de la espada
y la volubilidad de su espíritu
flaquea y decide sin tomar un respiro

Siempre hay un tonto en toda historia
que se inmuta al sonar del vacío
que incendia su ego al morir el día
rompiendo en llanto contra la multitud

Siempre hay un tonto en toda historia
que la cuenta, sabiendo el final
fingiendo que todo está oculto
y que el destino es un dado más... que jugar

Siempre hay un tonto en toda historia
que mira al pasado como quien
intenta atravesar con su mirada
una pantalla de niebla densa

Siempre hay un tonto en cada historia
que al fin y al cabo no tiene opcion
como no la tuve yo en esta historia
mas que admitir que el tonto... soy yo

no hay lugar más seguro
que las alas de la noche
que me acogen en su regazo
prenden en fuego mi ilusión
desatando la fantasía

en sus dominios vuelo
y la soledad se convierte
cambia de nombre
pintándose de libertad

oh, gloriosa noche
inmaculada soledad
tuyo soy y en ti despierto,
nazco, peleo y muero

por ti, oh dulce noche
inspiración divina
oscuro cielo abrazándome
muriendo conmigo y mis ideales